LATINOAMERICA (Enero 22 de 2021). A lo largo de la historia el chile ha sido un producto fundamental en cocinas orientales y centroamericanas. Países como China, Japón, Tailandia, India, Korea, Sur África, Butan México, Jamaica o Hati, han incluido el ají en su gastronomía como ingrediente fundamental de su cultura.
En cuanto al crecimiento de consumo de ají en el mundo, basta con saber que la conocida marca Dunkin Donuts desarrolló una donut picante para la venta en Estados Unidos a finales de 2020. Colombia no figura como uno de los países consumidores de ají, aunque el mercado de este insumo se ha duplicado en los últimos tres años. Se debe tal vez al auge de la cultura gastronómica en las ciudades principales, y a la influencia que hoy tiene la cocina oriental, mexicana y peruana en el desarrollo económico del sector restaurantero.
Sin embargo, y a pesar de una historia donde el ají ha sido parte exclusiva de la vida de las culturas indígenas, y de su uso en pequeñísimas dosis para las salsas que acompañan sancochos y empanadas, en Colombia hay hoy más de 300 hectáreas sembradas, y grupos de agricultores que saben de ají como los más expertos. Variedades como el Tabasco, Habanero, la Cayena y el Jalapeño adornan los paisajes de los Departamentos del Cauca y del Valle del Cauca, con su producto de exportación.
Desde hace más de 40 años, una empresa colombiana, fundada en el Valle del Cauca, exporta ají en pastas para la industria alimentaria del mundo. Con más de 400 familias anuales beneficiadas con contratos agrícolas con esta empresa, surten mercados europeos, americanos, caribeños, asiáticos y africanos. Países como Holanda, Sud África, Estados Unidos, Panamá, Reino Unido, Egipto, China y otros, consumen chile colombiano de la mejor calidad.
Todo esto pasa gracias a Hugo Restrepo y Cía. cuyo fundador llevaba su nombre y quien con dedicación construyó un negocio próspero y al mismo tiempo una apuesta por el desarrollo del campo colombiano, bajo unos valores de mercado justo y respeto por el medio ambiente. De la mano de su primer cliente, Mc.illhenny de la marca Tabasco, y todos los clientes que llegaron después, durante 44 años ha recogido la experiencia y formado un equipo de personas expertas en ají con el fin de proveer a los mercados internacionales un producto competitivo de alta calidad. Tal vez en la enchilada que te comiste ayer, o en el Kimchi que probaste el año pasado, el Jerk jamaiquino que ensayaste este verano, o en esa donut picante que estás por probar, haya una deliciosa porción de ají colombiano.
Si te interesa conocerlos, visítalos en www.hugorestrepo.com
Fuente: Central de Noticias AndeanWire
Source: AndeanWire-Colombia